Las tres recetas que presentamos son tres formas diferentes de preparar la calabaza de castilla. Primera forma es cocerla en el agua, segunda hornear y tercera sazonar. Tómalas solo como tres ideas, todos los detalles los puedes ir adaptando a tu gusto.
Sopa de Calabaza de Castilla con Garbanzo

Quita la cáscara de garbanzo, con mucho cuidado, porque está muy dura. Picas la calabaza en cuadritos. Por separado precoces los garbanzos.
En la olla pones ghee y añades fenogreco. Puedes usar también otras especias de tu gusto. Lo fries y añades cebolla picada. La fries hasta que esté transparente.
Añades cuadritos de calabaza y los sazonas 2 o 3 minutos. Después añades garbanzo cocido y sazonas unos minutos más. Agregas agua, la mejor es la que se usó para cocinar garbanzos. Añades sal, cúrcuma y perejil (fresco o seco).
Tapas la olla, esperas que hierva y lo coces 10 a 15 minutos, si es olla express o 20 minutos, si es olla normal. Sirve la sopa con pan integral, se combina excelentemente.
Puedes checar el proceso también en el siguiente video.
Provecho.
Calabaza de Castilla al Horno

Esta receta es la más fácil. La calabaza cortada en pedacitos la colocas en el sartén, con cáscara. Así como ves en la foto. La horneas de 30 a 40 minutos en 200 grados.
Es un postre increíble, el dulce natural de la calabaza toma su poder. Lo más bello es, que tenemos un dulce sin usar azúcar. La comida más natural que podríamos pedir.
Si nunca probaste la calabaza preparada en esta forma, deberías probarla. Es realmente deliciosa.
Calabaza de Castilla Sazonada

Limpia la calabaza y quítale la cáscara. Pícala en cuadritos.
En la olla calienta ghee y frie semillas de mostaza negra y comino. Después anexa calabaza picada y sazónala alrededor de 15 minutos. También agrega sal y cúrcuma y un poco de agua para para que se cosa más fácil.
Si no lo probaste todavía, prepárate para algo realmente rico. La puedes servir con arroz o tortilla o frijol o con ensalada cruda, comerla sola o en cualquier otra forma que se te ocurra.